Brilianto
loading...

Diamantes rusos: claves de las restricciones de G7 y UE

El 1 de marzo entró en vigor la segunda fase de las restricciones establecidas por el Grupo de los Siete (G7) y la Unión Europea (UE) a los diamantes rusos, que en 2022 representaron un tercio del total mundial de extracciones de diamantes de mina. Si a partir del 1 de enero de 2024 había sido prohibida la importación directa de estas piedras preciosas desde Rusia, en esta nueva etapa, que se irá desplegando de manera gradual, el veto se aplica a la importación indirecta de diamantes rusos procesados (talla o pulido) en terceros países y de joyas que incorporen estos diamantes. En septiembre se introducirá un sistema de certificación basado en blockchain para verificar con la máxima fiabilidad donde se han extraído las gemas.

El sector mundial del diamante se enfrenta a su mayor transformación en décadas. ¿Cuáles son las claves de este ambicioso régimen de prohibiciones y del nuevo paradigma de trazabilidad que se abre paso? En el blog de Brilianto os explicamos los aspectos más destacados de todos estos cambios.

El G7 impulsa una nueva certificación de diamantes para impedir la importación de diamantes rusos

Comercio internacional de diamantes: ¿qué cambia el 1 de marzo?

Desde el 1 de marzo, los estados del Grupo de los Siete (G7), Estados Unidos (EEUU), Japón, Alemania, Reino Unido, Francia, Italia y Canadá, junto con la UE, miembro de facto, han extendido la prohibición a la importación indirecta de diamantes extraídos en Rusia de 1 quilate o más, es decir, los tallados o pulidos en un tercer país.

¿Qué requisitos exigen ahora los países del G7 y de la UE a la importación de diamantes?

No todos los países comprometidos con el nuevo marco de restricciones son igual de celosos a la hora de exigir documentación y certificaciones para la importación de diamantes. En EEUU, por ejemplo, lo que se pide es una autocertificación.

EEUU: autocertificación

Estados Unidos ha apostado por la autocertificación. En otras palabras, se exige que los importadores generen una declaración con el membrete de la empresa confirmando que su envío no contiene diamantes rusos, según las nuevas reglas de la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP, Customs and Border Protection). Esto no quiere decir que las autoridades no vayan a pedir la documentación que respalde la declaración del importador.

Unión Europea: certificado de Kimberley Process y documentación

Las directrices de la UE son más estrictas que las de Estados Unidos. Así, los importadores deben proporcionar información sobre el origen de todos los diamantes de 1 quilate o más. Quienes importen diamantes en bruto deben presentar un certificado de Kimberley Process de origen único (no se mezclan diamantes de diferentes procedencias). Los agentes de aduana pueden solicitar más documentación.

Los importadores de piedras procesadas deben presentar una declaración de que ninguno de sus diamantes fue extraído en Rusia, junto con la documentación que lo acredite.

¿Cómo cambia el comercio de diamantes con la tercera fase de las restricciones en septiembre?

A partir del 1 de septiembre de 2024, todos los diamantes comprados o vendidos en la UE deberán disponer de un certificado de origen basado en la tecnología blockchain y validado en el hub del sector en Amberes (Bélgica). Este certificado ya está funcionando en una prueba piloto con un pequeño grupo de empresas.

Esta nueva acreditación fijará estándares más altos para la autenticidad y trazabilidad de los diamantes.

Asimismo, en septiembre las restricciones podrían aplicarse también a los diamantes de medio quilate.

¿Qué objetivo tienen las sanciones a la importación de diamantes rusos?

El objetivo del régimen de sanciones es impedir que la Federación Rusa siga financiando la guerra en Ucrania mediante la exportación de diamantes a los países de la UE y del G7. El Estado ruso controla el 33% del capital de Alrosa, la compañía rusa de minería de diamantes en Siberia que funciona como un monopolio. Esta participación accionarial significa que la extracción de diamantes en Rusia contribuye a los ingresos del estado que ha atacado a Ucrania.

¿Qué importancia tiene la industria rusa de diamantes?

Rusia es el mayor productor de diamantes del mundo, con un volumen de negocio anual de unos 4.500 millones de dólares. Se trata de una cifra enorme, que se empequeñece cuando se compara con los ingresos de las exportaciones rusas de gas y petróleo que, a pesar de las sanciones, ascendieron a una cantidad récord de 384.000 millones de dólares en 2022.

¿Qué valor simbólico tiene la prohibición de los diamantes de origen ruso?

Las restricciones impuestas por el G7 y la UE tendrán un impacto teórico limitado, si lo comparamos, por ejemplo, con el que puedan tener las aplicadas a actividades de más peso en la economía rusa como el gas y el petróleo. Así que la gran utilidad de este nuevo régimen de sanciones es en buena parte simbólica, al tratarse de un sector económico distintivo de Rusia que es monopolizado por una empresa estatal (Alrosa produce más del 90% de los diamantes rusos).

El sector del diamante ruso tiene una importancia que va más allá de su trascendencia económica:

  • El ministro de Finanzas ruso, Anton Siluanov, preside el consejo supervisor de Alrosa.
  • Un submarino de la flota rusa del Mar Negro luce el nombre de la empresa en virtud de un acuerdo de patrocinio con la Marina rusa.

¿Qué impacto habían tenido hasta ahora las restricciones?

En abril de 2022, pocas semanas después del inicio de la invasión de Ucrania, Estados Unidos y Reino Unido aprobaron sanciones contra la industria rusa de diamantes que se han demostrado insuficientes y, por tanto, ineficaces. Hacía falta un acuerdo con más músculo, como el que se acabó consiguiendo con el impulso del G7 y de la UE, y con la colaboración del hub del diamante de Amberes, que hasta entonces había desconfiado de las sanciones.

Por otro lado, el Kimberley Process, régimen comercial multilateral para evitar el comercio de diamantes de zonas de conflicto, fue inútil para obstaculizar la exportación de diamantes de un país, Rusia, que ha comenzado una guerra. Este acuerdo internacional, que busca impedir el comercio de los denominados diamantes de sangre extraídos en zonas en conflicto, toma decisiones por unanimidad, de manera que el veto de Rusia era un obstáculo insalvable.

La ausencia de herramientas sancionadoras contundentes ha facilitado las cosas al sector ruso del diamante, al menos hasta hace bien poco. Alrosa y otros operadores rusos podían enviar las gemas al extranjero para que fuesen talladas y pulidas y, desde allí, exportadas a Estados Unidos o Reino Unido, saltándose así las limitaciones. Tengamos presente que el 90% del suministro global de diamantes se procesa en India, siendo el origen Rusia u otros países.

Mina rusa de diamantes de Mir
Mina rusa de diamantes de Mir.

¿Qué impacto tendrán las prohibiciones en la industria rusa de los diamantes?

Está por ver la eficacia de las prohibiciones impulsadas por G7 y UE. Seguramente que se cerrarán muchas de las brechas que hasta ahora facilitaban que unos diamantes vinculados a un conflicto bélico llegasen a las economías occidentales.

Pero, ¿hasta qué punto serán efectivas?

  • Hemos visto que las sanciones al gas y petróleo ruso no han tenido el impacto que se esperaba.
  • Por otro lado, la cadena de suministro del sector del diamante es particularmente compleja.
  • Y, finalmente, veremos si parte de las ventas de diamantes rusos que se pierdan se compensan con la exportación a dos países, China e India, con una demanda creciente de estas piedras preciosas. Al menos eso es lo que ha pasado con las restricciones a las importaciones de combustibles fósiles rusos.

¿Más obstáculos a los diamantes de sangre?

El régimen de sanciones a la importación de diamantes rusos podría estrechar aún más el cerco a los diamantes de sangre. El Kimberley Process se ha demostrado eficaz para evitar que grupos rebeldes se financien con el dinero obtenido con la minería de diamantes, pero los gobiernos que han ejercido violencia contra su población o contra la población de países vecinos han podido seguir llenando sus arcas con este negocio.

El nuevo sistema propulsado por Unión Europea y G7 no solo dificultará la venta de diamantes rusos, sino que también lo hará con los que procedan de otras zonas con conflictos insuflados por los propios gobiernos. Por tanto, podría ser que toda esta transformación del sector favorezca el comercio de los diamantes éticos, que están libres de cualquier conflicto, explotación o daño al medio ambiente.

VIEW
CLOSE